El diseñar con la iluminación es mucho más que un simple problema técnico circunscripto a determinar cuantos lux debe tener un lugar: implica entender que un buen tratamiento de la luz puede variar sensiblemente el concepto de espacio, puede mejorar las condiciones de vida de sus habitantes, genera sensibles mejoras en el comercio y en el trabajo, y provee de una estética diferenciada al momento de percibir espacios interiores y exteriores que conquistan y seducen por la respuesta emocional y sensitiva que puedan producir desde la luz como elemento de diseño.

La luz natural y artificial excita nuestros ojos permitiéndonos la visión del mundo que nos rodea. Es así que necesitamos tener en cuenta ciertos estudios de las características luminosas y constructivas de los diferentes tipos de fuentes de luz artificiales y de los aparatos donde se instalan.

La iluminación, posee la magia de modificar los espacios interiores o exteriores a nuestra voluntad. Así podremos convertir el mismo ambiente en un estar agradable y distendido para una reunión social, en un hábitat para el relax, en un recinto con dramatismo teatral o cualquier otra ambientación que nuestra imaginación pueda crear.

Así, además existe la opinión de Profesionales en el tema de la Iluminación, como el reconocido electricista Douglas Leonard que menciona en su entrevista para la Revista Electro industria,
“El diseño de iluminación en Chile está en pañales”